La región representa esa cifra actualmente gracias a su crecimiento interanual del 9% en 2012 que la convirtió en el segundo mercado móvil de más rápido crecimiento en todo el mundo con ingresos por US$107 mil millones.
El dato, que no es menor, se desprende del informe Economía móvil América Latina 2013 realizado por GSMA Intelligence de GSMA, la agrupación de operadores y fabricantes que organiza entre otros el Mobile World Congress en Barcelona.
Los movimientos en el mercado móvil regional con Windows Phone desplazando a BlackBerry y los nuevos actores como Firefox OS, además de la hegemonía de Android, dejan una pregunta en el aire: ¿En qué momento se encuentra dicho mercado en la región? La respuesta la tiene GSMA:
«El mercado móvil de Latinoamérica está entrando ahora en una fase nueva de su desarrollo, caracterizada por su creciente madurez y la ralentización del crecimiento de los ingresos y los suscriptores».
Sin embargo, advierte el informe, sigue existiendo un importante potencial de crecimiento futuro que vendrá probablemente impulsado por la introducción de nuevos servicios y aplicaciones y por la aceleración de la adopción de la banda ancha móvil.
Mercado móvil en LatAm: ¿De qué estamos hablando?
Bueno, pues hablamos de una región con 610 millones de habitantes que a mediados de 2013 contaba con 632 millones de conexiones de SIM y 319 millones de suscriptores únicos con tasas de penetración del 104 y el 52% respectivamente; las medias del mercado mundial de países en desarrollo son el 79 y el 38%.
Hablamos también de que a finales de 2013, la penetración de los smartphones se aproximará al 20% de la población -apenas inferior a la media mundial- y cuya proyección para 2017 la ubica en 44%. Respecto al potencial de crecimiento futuro, el informe es contundente: «El potencial de las nuevas aplicaciones móviles de “tercera ola” y las oportunidades de conectividad máquina-a máquina sigue en gran medida sin explotar en América Latina».
Otros hallazgos relevantes del informe a continuación:
→ Operadores móviles han realizado inversiones considerables en la construcción de redes y el incremento de la capacidad en los últimos años: El capex (gastos de capital) total ha alcanzado casi los US$50 mil millones en los últimos cuatro años. «Dada la necesidad de incrementar aún más la capacidad y desplegar redes LTE, se espera que la industria invierta aún más en el futuro», apunta el informe.
→ La industria móvil es uno de los pilares de la economía: En 2012 la industria móvil contribuyó más del 3.7% al PIB regional; en Europa fue del 2.1%. El sector mantuvo 350 mil puestos de trabajo directos y aportó más de US$39 mil millones a las arcas públicas latinoamericanas. Esa contribución «se incrementará en el futuro con la construcción de la infraestructura LTE y el despliegue de una gama de nuevos servicios y aplicaciones». Para 2020 la industria generaría el 4.5% del PIB de la región, es decir US$350 mil millones.
→ La industria móvil ya está haciendo una importante contribución social: El informe ve un potencial para un impacto mayor en el futuro gracias a las tasas crecientes de penetración y nuevos despliegues de red y apunta a que las pymes se integren en la cadena de valor móvil a través de la oferta de aplicaciones y contenido locales. Además, les hace un guiño de ojo a los emprededores:
«Hay cabida para nuevos servicios móviles y aplicaciones que podrían hacer contribuciones significativas a la solución de distintos retos que se plantean en la región, en áreas como el crecimiento sustentable, la salud, la educación y el acceso a servicios financieros».
Y el ejemplo está en que el mercado de Salud Móvil en la región podría alcanzar por sí solo US$1.600 millones en 2017.
→ La banda ancha móvil ha desempeñado un papel clave, tanto para potenciar el crecimiento como para alcanzar objetivos sociales: La región contaba con 164 millones de suscriptores de banda ancha móvil en junio de 2013, cifra que tendría un crecimiento del 30% anual en los próximos cinco años. «El precio de los planes de datos móviles se ha reducido significativamente en los últimos tres años, gracias a la introducción de innovadores planes prepagos diarios que están permitiendo a muchos sectores de bajos ingresos en Latinoamérica acceder a Internet por primera vez».
Los desafíos de la industria móvil
Sin duda hay un potencial de la industria móvil que puede impulsar el desarrollo económico de la región, pero según la GSMA, hay importantes desafíos para hacerlo realidad. «Una de las principales preocupaciones de los operadores de América Latina es la necesidad de un régimen regulatorio más transparente, previsible y consultivo», dice, y apunta a problemas como la falta de transparencia y de consultas en el proceso de toma de decisiones, las prácticas injustas que favorecen a determinadas empresas o tecnologías y la falta de claridad (o existencia) de planes de desarrollo de la industria.
Por otro lado, también menciona que la regulación se ha vuelto más intervencionista y por eso «un mayor grado de colaboración entre la industria móvil, los reguladores y otras instituciones gubernamentales podría hacer realidad el potencial de los servicios móviles».
Por último y respecto a las consideraciones sobre calidad del servicio, que en países como Colombia están bajo la lupa, el informe pone en primer plano a la competencia, más que esa intervención regulatoria, como «el mejor motor para la mejora continua de la calidad de servicio móvil que los clientes esperan». En ese sentido, dirige la atención hacia los gobiernos y los reguladores como el marco para permitirle a los operadores «invertir con eficiencia y competir con eficacia».