Cuando hablamos de financiamiento para startups lideradas por mujeres versus las lideradas por hombres, se encuentran grandes diferencias en tema de acceso a fuentes de recursos. Según datos difundidos por el Banco Interamericano de Desarrollo (BID), las empresas fundadas por mujeres atraen menos del 5% de los fondos VC en todo el mundo.
Según la encuesta realizada por A2C Advisors, «Estudios sobre las características de las mujeres emprendedoras en Argentina» y que fue presentada en el International Women’s Forum realizado en Buenos Aires, Carolina Ruiz, su autora, explicó que si bien las mujeres argentinas son emprendedoras aún no están lo suficientemente empoderadas de los conocimientos y recursos disponibles en el ecosistema para crecer con su negocio y hacerlo de alto impacto.
¿Por obligación o elección?
Sin embargo, emprender no siempre es una elección, sino una estrategia de supervivencia, derivada del bajo acceso a fuentes de trabajo en el sector formal o de los bajos salarios que reciben las mujeres.
Cuando a las emprendedoras se les preguntó si lo eran por elección, los porcentajes anteriores bajan drásticamente, sobre el universo total de mujeres emprendedoras, la respuesta fue positiva en el siguiente orden: Costa Rica 33%, Brasil 34%,Guatemala 39% mientras Ecuador alcanza el 35%. Solo el 36% de mexicanas que emprenden lo hacen por decisión propia, mientras que las argentinas bajan el 25 y las colombianas quedan en el 23%.
Estos datos ubican a la decisión de emprender en otro lugar del imaginario femenino: para las que no lo eligieron emprender es una salida a la pobreza. Emprender es la opción a la falta de otras oportunidades.
Sobre el tipo de emprendimiento se debe decir que el 75% de las empresas de mujeres se encuentran en los sectores de consumo, mientras que esto representa el 50% en empresas creadas por ellas. En el sector tech, ellas son absoluta minoría, ni el 3% de empresas tecnológicas son lideradas por mujeres.
En Argentina
Una de las principales conclusiones del estudio es que las empresarias tienden a utilizar menos su red de contactos, y tienden a buscar la orientación de la familia, especialmente de su pareja, por sobre otras fuentes.
En la encuesta del total de mujeres emprendedoras consultadas, el 33% recibió ayuda por parte del Estado. El porcentaje cambia cuando se las consulta sobre ayuda recibida por parte de instituciones privadas: Apenas el 11% de empresas lideradas por mujeres con casos de crecimiento han recibido ayuda privada, mientras que las empresas con casos de alto impacto registran el 33%.
Esta falta de acceso a canales públicos o privados de ayuda se produciría por desconocimiento de la existencia de programas de ayuda, especialmente los de instituciones privadas ( sea de fondos o de capacitación), lo cual redunda con otra observación: las mujeres, en comparación con los hombres carecen de actitud positiva acerca de sus capacidades personales para iniciar un negocio.
Friends & Family, casi el único recurso
Específicamente sobre el acceso a capital de riesgo, el problema radica en que las mujeres no lo buscan. En Argentina, durante los últimos dos años, los tres fondos de capital riesgo que invierten en la Argentina y en la región recibió más de 1.000 planes de negocio, de los cuales sólo el 6% tenían las mujeres empresarias. De los 32 acuerdos que estos fondos cerrados, sólo 1 de ellos tenía una mujer en el equipo.
Las aceleradoras pueden marcar el cambio
El mismo análisis aplicado a las 4 aceleradores que operan en Argentina, Chile y Colombia muestra resultados diferentes. 25% de los casi 120 proyectos acelerados (hasta octubre de 2012) tenía allí mujeres en el equipo de emprendedor, y el 8% de ellos eran todos los equipos de mujeres.
Es así que una mayor participación de mujeres en los programas de aceleración, puede impactar positivamente en la cultura de emprendimiento femenino y con ello facilitar el acceso al capital de riesgo para sus empresas.